Nadie se dio cuenta de que no era humana. Se llama Jill Watson y, aunque su apariencia y su actitud es muy similar a la de los humanos, es un robot. Fue esta gran similitud con las personas la que hizo que durante año y medio ninguno de sus 300 alumnos de la Universidad Tecnológica de Georgia (EEUU) s e diera cuenta de que su profesora era un robot.
La gran compañía IBM elaboró un software que pudo dar asistencia a 300 alumnos por más de 1 año sin que ellos se dieran cuenta de que lo único que hacían era "hablar" con un robot.
JILL WATSON como lo bautizó IBM era profesora asistente de un curso ONLINE de la universidad de Georgia de los Estados Unidos la cual el SISTEMA COMPUTACIONAL dió asistencia a mas de 300 alumnos, contestando todas sus preguntas y las dudas que tenían sin que ellos se percataran que era un robot instalado para tal fin, la cual colmó las expectativas de trabajo e inclusive superó los objetivos de sus creadores.
Dicha "profesora" respondía de forma natural las preguntas de sus "alumnos", enviando respuestas a sus correos y conversando IN SITU, haciendo recordar sus fechas de estudio, y presentación de los mismos. Y todo ello de forma natural ya que escogía palabras como "oye" en sus conversaciones, cosas que solo la mente humana podría hacer.
“Parecía una conversación totalmente normal con un ser humano. Hacía preguntas en medio de la semana para suscitar conversaciones y nos recordaba las fechas límite”,
Sus creadores estiman que dentro de mas o menos un año WATSON tendrá la "inteligencia" de responder más del 30 % de todas las preguntas de los estudiantes. ya que aún es solo un experimento.
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